El libro escogido para el mes de noviembre en el café
literario es Sostiene Pereira de Antonio Tabucchi.
Antonio Tabucchi nació en Pisa (Italia) en 1943. Creció en casa de los abuelos
maternos en Vecchiano, lugar cercano a Pisa. Durante los años de estudios
universitarios en la Universidad de Pisa, Tabucchi realizó numerosos
viajes por Europa, siguiendo las huellas de los autores que había encontrado en
la rica biblioteca de su tío materno. Durante uno de estos viajes, en París, en
un banco de la Estación de Lyon, encontró el poema Tabacaria firmado
por Álvaro de Campos, uno de los heterónimos de Fernando
Pessoa. Fue a partir de entonces cuando empezó su interés por este escritor
portugués y sus numerosos trabajos sobre él, lo que le llevó a la fama.
Viajó a Lisboa, ciudad por la que desarrolló una verdadera pasión.
Escribió una tesis doctoral sobre el surrealismo en Portugal. Realizó
estudios de perfeccionamiento en la Escuela Normal Superior de Pisa y en 1973
recibió el encargo de enseñar lengua y literatura
portuguesa en Bolonia. En 1978, se trasladó a la Universidad de
Génova.
Entre 1985 y 1987 fue director del Instituto Italiano de Cultura de Lisboa.
Durante mucho tiempo vivió la mitad del año en Lisboa, donde escribía, con
su pareja —nacida allí— y sus dos hijos. La otra mitad del año vivía en
la Toscana, dando clases en la Universidad de Siena. En 2004 obtuvo
la ciudadanía portuguesa.
Tabucchi falleció el 25 de marzo de 2012 en el Hospital de la Cruz Roja de
Lisboa, a raíz de un cáncer.
Algunos de los temas más recurrentes en su obra están relacionados con la
búsqueda de la identidad y su ocultamiento, el viaje, el paso del tiempo y la
muerte, la memoria y el recuerdo, el sueño y el mundo onírico, el juego y sus
equívocos. También suele incluir en sus obras temas antropológicos, como la
gastronomía regional de los lugares visitados por sus personajes —especialmente
la cocina portuguesa—, y la preocupación por las minorías culturales,
sexuales y étnicas.
Como novelista, alcanzó éxito con Sostiene Pereira, que fue adaptada al cine, al igual que otra de
sus obras, Réquiem.
Escritor
comprometido, consiguió con su novela La cabeza perdida de Damasceno
Monteiro (1997) la revisión del caso que aparecía en la obra,
resolviendo el asesinato de un ciudadano portugués. Tabucchi también practicó
el género epistolar, como demuestra su compendio de cartas sin
destinatario: Si sta facendo sempre più tardi (2001). Colaboró
con diversos medios de comunicación, entre ellos Corriere de la Sera y
el diario El País.
Sostiene Pereira es una
de las cumbres de la literatura y con la que Antonio Tabucchi logró
la unanimidad de la crítica, los más prestigiosos galardones y la respuesta
masiva de los lectores.
Lisboa, 1938. La opresiva dictadura de Salazar, el furor de la guerra civil española llamando a la puerta, al fondo el fascismo italiano. En esta Europa recorrida por el virulento fantasma de los totalitarismos, Pereira, un periodista dedicado durante toda su vida a la sección de sucesos, recibe el encargo de dirigir la página cultural de un mediocre periódico, el Lisboa. Pereira tiene un sentido un tanto fúnebre de la cultura: prefiere la literatura del pasado, dedicarse a la elegía de los escritores desaparecidos, preparar necrológicas anticipadas. Necesitado de un colaborador, contacta con un joven, Monteiro Rossi, quien a pesar de haber escrito su tesis acerca de la muerte está inequívocamente comprometido con la vida. Y la intensa relación que se establece entre el viejo periodista, Monteiro y su novia Marta, cristalizará en una crisis personal, una maduración interior y una dolorosa toma de conciencia que transformará profundamente la vida de Pereira.
En esta novela, Tabucchi ha
conseguido crear un inolvidable personaje que sin duda dejará una profunda
huella en el lector, Pereira. Y con la historia de este periodista, Tabucchi nos
ofrece también una espléndida historia sobre las razones de nuestro pasado que
pueden ser perfectamente las razones de nuestro incierto presente.
Curiosidades
Las palabras «Sostiene Pereira» dan comienzo a la novela, y son después
repetidas con frecuencia, como si el autor hubiese escrito la declaración de
Pereira ante la policía o el juez. El ritmo es inicialmente muy lento, hecho de
introspecciones, para después acelerarse al mismo ritmo que aumenta la
turbación del protagonista.
En una nota al final del libro, Tabucchi explica que en portugués «pereira»
significa «peral» y, como todos los apellidos de árboles frutales, es de origen hebreo, así
como en Italia los apellidos de origen judío son nombres de ciudad. Con esto
quiere rendir homenaje al pueblo judío, perseguido por los fascismos europeos
en aquellos años.
La inclinación política de la novela resulta claramente antifascista. Por otra parte, el propio Tabucchi ha señalado
que «los que no amaban la situación política italiana lo tomaron como un
símbolo de resistencia desde dentro», en referencia a la llegada al poder
en Italia de Berlusconi con el partido Forza Italia en 1994,
apoyado por la reaparición del partido fascista Lega Nord.
Para ampliar
Fallece Antonio Tabucchi, un escritor que vivió su
tiempo "con pasión y rabia"
Película: Sostiene Pereira de Roberto Faenza (1996) - Película completa subtitulada al español