Las gemelas, de Ana Gallo. Primer premio en la modalidad A del II Concurso de Terror.

Primer premio de la modalidad A, de Primero a Tercero de la ESO

  En una pequeña ciudad del sur de Francia, vivía una madre con sus dos hijas gemelas. Todos los días, después de desayunar juntas, las acompañaba a la escuela. Las niñas siempre iban dadas de la mano. Aquel día salieron como siempre las tres juntas, cuando su madre recibió una llamada, tenía que ir rápidamente a su puesto de trabajo, había surgido un imprevisto, y las niñas conocían de sobra el camino. Entonces, dejó a sus hijas que siguieran solas hasta el colegio. No había dado ni diez pasos cuando escuchó a sus espaldas el ruido de un fuerte golpe seguido de un frenazo, cuando giró la cabeza, pudo ver los cuerpos de las gemelas que yacían inertes bajo un camión. Todavía estaban cogidas de la mano.

   La mujer se sumió en una profunda depresión de la que consiguió salir gracias a un nuevo embarazo, casualidades de la vida, volvía a tener gemelas (tatatachann)

   Cuando las niñas nacieron, el parecido con las otras gemelas era asombroso. Mientras las niñas crecían, la madre se volvió más protectora. Le aterrorizaba la idea de que pudiera perderlas.

   Un día, yendo al colegio, las hermanas corrían ante la atenta mirada de su madre, las detuvo bruscamente y con lágrimas en los ojos les suplicó que no cruzaran nunca sin su permiso. Entonces las niñas contestaron: 

   - No pensábamos hacerlo, ya nos atropellaron una vez, mamá. No volverá a ocurrir. 

   Desde entonces algunos conductores aseguran que al pasar por ese tramo unas interferencias se cuelan en la radio y se oye una misteriosa melodía: el tarareo de unas niñas.

                                                                                                                      Ana Gallo (3ºESO)